Tomar una cucharada sopera de polen pulverizado, mezclarla con algún tipo de miel y disolverlo todo en un líquido caliente o templado, de forma diaria.
La regularidad en la dosis es muy importante para obtener los mejores resultados.
Tomar una cucharada sopera de polen pulverizado, mezclarla con algún tipo de miel y disolverlo todo en un líquido caliente o templado, de forma diaria.
La regularidad en la dosis es muy importante para obtener los mejores resultados.